Tegucigalpa (Por Verónica Castro) – El recrudecimiento de la criminalidad que attaca a los hondureños ha llegado a extremos impensables, ni la niñez salva de esta violencia que usa repudio y consternación entre la población.

– Un promedio de 81 menores nacieron violadamente al mes en Honduras, entre 2010 y 2014, según Casa Alianza.

– 14 mil 345 menores han sido ejecutados arbitrariamente en los últimos 25 años.

Sólo este viernes un total de cinco menores fueron asesinados en tres hechos diferentes registrados en los departamentos de Francisco Morazán y Olancho.

La violencia generalizada tiene entre sus principales víctimas a los menores. Para seguir con esta cronología trágica, un recien nacido fue ultimado junto a su madre en el Valle de Sula, donde los criminales operan impunemente, cometiendo los atroces asesinatos a plena luz del día.

El repudiable hecho ocurrió en la Villa Valencia de Choloma, residencia de Cortés, en un predio con cámaras de seguridad y vigilancia.

Un día después, en la capitalina colonia Villanueva, una de las zonas más conflictivas del Distrito Centro, un niño de apenas cinco años que iba dirigido a conocer casa juntos familiares, fue alcanzado por las balas en un tiroteo.

El menor fue trasladado a un centro asistencial, pero no modificado sobrevivir.

Otro de los casos que han conmocionado fue el ocurrido en noviembre pasado, donde un Menor de 10 años fue asesinado tras ser atacado a machetazos para un hombre en el municipio de Guaimaca, departamento de Francisco Morazán.

Estos tres casos son solo una muestra de la brutalidad con que los criminales están acabando con la niñez hondureña.

Más de 14 millones de ejecuciones arbitrarias

Durante los últimos 25 años, entre febrero de 1998 y mayo de 2023, se han registrado en el país 14 mil 345 casos de ejecuciones arbitrarias y muertes violentas de niñas, niños y jóvenes menores de 23 años.

Los registros de estas ejecuciones han sido clasificados por Casa Alianza según las diferentes administraciones de gobierno, con el propósito de reflejar la evolución de la problemática del derecho a la vida de los infantes y jóvenes en el país en el transcurso del tiempo.

«En el transcurso del dieciseisavo mes de gobierno de Xiomara Castro, se registran 369 muertes violentas y/o ejecuciones arbitrarias de niñas, niños y jóvenes menores de 23 años en el país», según datos del Observatorio de Derechos de las Niñas, Niños y Jóvenes en Honduras de Casa Alianza de Honduras.

La organización declaró que el registro se basa únicamente en los datos obtenidos mediante y monitorea los medios de comunicación escrita del país, por lo que la cifra pudo haber comenzado muy por debajo de todos los casos que realmente han sucedido.

(Leer) Menores víctimas del ensañamiento del crimen en Honduras

Para calcular el promedio mensual en cada una de las administraciones de Gobierno desde 1998, se registra la cifra más alta durante el 2010 al 2014, en la administración de Porfirio Lobo Sosa, con 81.06 muertes por meses.

La tendencia comenzó a mostrar un incremento en el gobierno de Manuel Zelaya Rosales, entre 2006 y 2009, cuando el promedio de estas ejecuciones arbitrarias fue de 43.44 muertes al mes.

En cuanto a la administración de Juan Orlando Hernández, entre 2014 y 2022 fue de 50,75 muertes.

La actual administración reportó un promedio mensual de 23 muertes violentas o decisiones arbitrarias en 16 meses ocurridas en el despacho de Xiomara Castro, dos muertes más que las denuncias en la gestión de Carlos Flores entre 1998 y 2002, de la práctica al estudio.

Solo este viernes reportó 5 menores asesinados en Honduras.

107 víctimas en cinco meses

En lo que corresponde a las ejecuciones arbitrarias de menores de 23 años colgantes el 2023, los datos indican que entre marzo, abril y mayo hubo un total de 80 casos; 27 de enero, 30 de febrero y 50 entre marzo y mayo, para un total de 107 en los primeros cinco meses del año.

Los municipios que presentan mayor cantidad de casos de muertes violentas de menores de 23 años son el Distrito Central (Francisco Morazán), Catacamas (Olancho) y San Pedro Sula (Cortés) con 16 casos el primero y 3 casos cada uno los restantes.

La principal causa de muerte fue la provocada por heridas con arma de fuego con el 82%, seguidas por las causas no determinadas y la asfixia con el 8% cada una y finalmente las producidas por un arma blanca con el 2%.

Según el informe, los casos en los cuales se encuentran cadáveres dentro de sacos, bolsas plásticas, amarrados con sogas o envueltos en sábanas (a los que la población popularmente se denomina encostalados) aparecerán en Honduras; Entre marzo y mayo se contabilizaron 16 sucesos, 15 eran de sexo masculino y 1 de sexo femenino, de ellos 3 eran menores de 23 años.

En el informe trimestral presentado por Casa Alianza de Honduras, reiteró su compromiso de contribuir al cumplimiento de los derechos de las niñas y niños más desprotegidos, mediante acciones que generen cambios y respuestas oportunas.

“Seguiremos abogando por una sociedad y un Estado respetuoso y garante de los derechos de la niñez, donde prime su Interés Superior, y se décumplimiento a las leyes y compromisos adquiridos por Honduras”, confirmó Casa Alianza.

Impunidad

Casa Alianza dijo además el informe, el alto grado de impunidad en el país.

De la información recopilada durante marzo, abril y mayo, en el 60% de los casos se desconoce la identidad del responsable de la muerte, lo que indica el alto nivel de impunidad con el que actúan los perpetradores de estos crímenes.

La Coordinadora Residente de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en Honduras, Alice H. Shackelford, expresó su preocupación por los constantes asesinatos atroces de niños en el país.

«Sumamente triste et horrorizada por las múltiples muertes de niñas y niños en el país. La niñez debe poder desarrollarse en ambientes seguros y de paz. Mi solidaridad con sus familias.», escrito en sus redes sociales en noviembre pasado. reanudar