Mercedes-Benz avanza en la posible venta de su negocio de leasing Athlon, en conversaciones con BNP Paribas por un valor estimado de 1.000 millones de euros. Aunque las negociaciones se encuentran en curso, no existe certeza sobre la conclusión del acuerdo, y otras partes interesadas también podrían sumarse al proceso de adquisición. La operación forma parte de la revisión estratégica que el fabricante alemán realiza sobre sus operaciones globales y su enfoque en la rentabilidad futura.
La unidad de leasing Athlon fue adquirida por Mercedes-Benz en 2016 al prestamista holandés Rabobank por aproximadamente 1.100 millones de euros, con el objetivo de integrarla con su división de gestión de flotas. Desde entonces, la compañía ha buscado optimizar sus recursos frente a un entorno económico complejo y un mercado automotriz en constante cambio, afectado por la guerra comercial entre la Unión Europea y Estados Unidos, la pérdida de cuota de mercado en China y la demanda europea moderada.
Ajuste de previsiones por impacto económico y arancelario
El conglomerado alemán comunicó hace poco una disminución en su proyección del margen operativo para 2025, anticipando que sus ganancias estarán sustancialmente por debajo de los 13.600 millones de euros obtenidos el año anterior. Los aranceles establecidos por Estados Unidos han tenido un efecto estimado en 362 millones de euros, mostrando las dificultades externas a las que la empresa se enfrenta.
En el primer semestre de 2025, Mercedes-Benz reportó un beneficio neto atribuido de 2.593 millones de euros, lo que representa un descenso del 55,8 % respecto al mismo periodo del año anterior. Paralelamente, el beneficio operativo (EBIT) se redujo en un 55 %, alcanzando los 3.562 millones de euros. Estos resultados subrayan la necesidad de la compañía de ajustar su estructura y explorar la desinversión en activos no estratégicos.
Impacto para BNP Paribas y el sector de arrendamiento
Si la transacción se lleva a cabo, BNP Paribas integraría Athlon en su subsidiaria de leasing y renting Arval, establecida en 1989, fortaleciendo así su posición en el mercado europeo. Las empresas de movilidad han tenido dificultades debido al aumento de autos eléctricos en sus flotas y a la complejidad de prever los valores residuales de los coches. En 2024, Arval reportó una ganancia neta atribuible de 1.087 millones de euros, un 21 % menos que el año anterior, lo que muestra la inestabilidad y los retos del sector.
BNP Paribas muestra su interés hacia Athlon, lo cual refleja la consolidación dentro del ámbito de leasing y renting, donde las tácticas para mejorar la eficiencia y ampliar las flotas eléctricas son ahora prioritarias. La compra ayudaría al banco a fortalecer su posición frente a otros actores del mercado y a beneficiarse de sinergias operativas con su negocio actual de Arval, incrementando su habilidad para proporcionar alternativas variadas de movilidad en Europa y otras áreas estratégicas.
Visiones futuras y siguientes pasos
Aunque la negociación aún no está cerrada y existen otras partes interesadas, la operación marca un movimiento clave en la estrategia de Mercedes-Benz para optimizar su cartera y fortalecer su posición financiera ante un entorno económico desafiante. La venta de Athlon representa no solo una reestructuración de activos, sino también una respuesta a la creciente complejidad del mercado automotriz, donde la transición hacia la electrificación y la eficiencia operativa se ha convertido en un factor decisivo para la competitividad.
El desarrollo de esta operación será determinante para Mercedes-Benz y BNP Paribas, así como para el sector de leasing en Europa, estableciendo posibles precedentes para futuras transacciones en un mercado en transformación constante.