El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha delineado una serie de medidas que planea implementar en su primer día de mandato, destacando su intención de eliminar la ciudadanía por nacimiento y ofrecer indultos a quienes fueron procesados por el asalto al Capitolio. Estas acciones, según el republicano, marcarán el comienzo de su segundo mandato, que iniciará el próximo 20 de enero, cuando asuma oficialmente el cargo en una ceremonia en el Capitolio.
Tras su investidura, Trump se trasladará a la Casa Blanca, donde tiene previsto firmar una serie de órdenes ejecutivas que, aunque significativas, podrían enfrentar obstáculos legales. Durante la campaña, el presidente hizo comentarios provocativos, sugiriendo que podría actuar como un «dictador», y prometió abordar temas como la seguridad fronteriza y el aumento de la producción de combustibles fósiles.
Uno de los principales focos de atención es su plan para transformar el sistema de inmigración. Trump ha manifestado su deseo de poner fin al principio de la ciudadanía por nacimiento, consagrado en la Enmienda 14 de la Constitución, lo que impediría que los hijos de inmigrantes indocumentados obtengan la nacionalidad estadounidense. En una reciente entrevista con NBC News, Trump afirmó que esta enmienda debería ser eliminada, argumentando que Estados Unidos es “el único país que lo tiene”, aunque existen otras naciones que también garantizan este derecho a los recién nacidos.
La modificación de la Constitución requiere el apoyo de dos tercios de ambas cámaras del Congreso y la ratificación por parte de tres cuartos de los estados, lo que podría complicar su propuesta. Además, su plan para llevar a cabo deportaciones masivas plantea desafíos logísticos significativos, considerando que más de 11 millones de personas indocumentadas residen en el país, muchas de ellas desde hace años. Trump ha indicado que las primeras deportaciones se dirigirían a aquellos que han cometido delitos en Estados Unidos, aunque la implementación de este plan podría tener repercusiones económicas y legales.
En cuanto a los ‘soñadores’, aquellos inmigrantes que llegaron al país siendo niños y están protegidos bajo el programa DACA, Trump ha mostrado una postura más comprensiva, prometiendo desarrollar un plan que les permita permanecer en Estados Unidos.
Otro de los asuntos destacados es su intención de indultar a las personas acusadas por el asalto al Capitolio en 2021, donde un grupo de sus seguidores intentó interrumpir la certificación de la victoria electoral de Joe Biden. Trump ha expresado su empatía hacia los detenidos, quienes, según él, están viviendo una experiencia desgastante. Durante la campaña, también prometió despedir al fiscal especial Jack Smith, responsable de la acusación relacionada con el asalto, aunque esta acción ya no será necesaria debido al cierre de la acusación tras las elecciones.
En el ámbito energético, Trump ha manifestado su intención de deshacer las regulaciones establecidas por Biden para fomentar la producción de vehículos eléctricos, así como aumentar la extracción de petróleo y gas natural. Su lema, «Perforar, perforar, perforar», refleja su enfoque hacia la política energética, que ya había implementado durante su primer mandato, cuando retiró a Estados Unidos del Acuerdo de París.
El presidente electo también tiene planes para abordar temas relacionados con los derechos de las personas LGTBI. Ha expresado su deseo de prohibir la participación de mujeres trans en deportes femeninos y vetar las cirugías de afirmación de género para menores, asuntos que han resonado con ciertos sectores de su base electoral. Además, busca recortar la financiación federal a centros educativos que aborden temas de raza, género y orientación sexual, aunque esto requeriría la aprobación del Congreso.
En el ámbito internacional, Trump ha afirmado que tiene un plan para poner fin a la guerra en Ucrania en un plazo de 24 horas, aunque los detalles de dicho plan aún no han sido revelados. También ha emitido advertencias a Hamás, amenazando con consecuencias severas si no se liberan a los rehenes estadounidenses en Gaza antes de su toma de posesión.
Con estas promesas, Trump busca reafirmar su agenda y conectar con su base electoral, mientras se prepara para asumir nuevamente la presidencia en un contexto político dividido. Su enfoque en la inmigración, la energía y los derechos de las minorías marcará un periodo de intensos debates y desafíos en su segundo mandato.