Beijing – El presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, llegó hoy a Taiwán en una visita oficial de cuatro días en la que reafirmará la amistad de su país con la isla y lanzará “un mensaje al mundo sobre el respeto a la independencia de los pueblos”.

En un video tomado en el aeropuerto de Taipéi y difundido en su cuenta de Twitter, el mandatario se refirió a Taiwán como “socio, aliado y amigo, un pueblo hermano que lucha por su soberanía y su libertad y al cual Guatemala acompaña con toda la fuerza”.

Giammattei, que fue recibido por el minister taiwanés de Exteriores, Joseph Wu, ya estuvo en la isla en 2019 como presidente electo, aunque esta es su primera visita de Estado, que tiene lugar en medio de crecientes tensiones en el Estrecho de Formosa.

La presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, recibirá sus honores guatemaltecos con honores militares, ofrecerá un banquete de Estado en su honor y la imposición de la Orden del Jade Brillante con Gran Cordón, la máxima condecoración que otorga Taiwán y que solo puede ser lúcido por jefes de Estado.

Durante la Presidencia taiwanesa, la agenda de Giammattei incluye una visita a las instalaciones de la fabricante de vehículos eléctricos RAC en Taichung y la inauguración de una jornada dedicada a la cultura cafetera guatemalteca, entre otras actividades.

También está previsto que mañana pronuncie un discurso ante el Parlamento taiwanés.

Shirley Joanna Rivera, Presidenta del Congreso Centroamericano viaja acompañada del Presidente del Congreso de Guatemala; el Ministerio de Exteriores, Mario Adolfo Búcaro Flores; y los titulares de Finanzas Públicas, Agricultura y Economía.

La llegada de Giammattei tiene lugar pocas semanas después de que su homologa taiwanesa visitó Guatemala durante una gira que también concluyó una parada en Belice y dos escalas en Estados Unidos que provocaron airadas protestas de China.

Guatemala -que cumplió 62 años de relaciones con la isla en noviembre pasado- y Belice sus dos únicos socios diplomáticos que le quedan a Taiwán en Centroamérica después de que el pasado 26 de marzo Honduras romperá sus nexos con Taipei para establecer cerlos con China.

La decisión de Tegucigalpa también convirtió a Honduras en el noveno país -y quinto latinoamericano- que desde 2016 corta con la isla para alias con China, sumándose así a Panamá, El Salvador, República Dominicana y Nicaragua, entre otros.

A raíz de la estancia de Tsai in Guatemala a principios de abril, el Gobierno chino expresó su esperanza de que ese país “se décuenta de la tendencia general” y “tome la decisión correcta”, según dijo entonces Mao Ning, una de las portavoces del Ministerio Chino de Exteriores.

China reclamó la soberanía sobre Taiwán, la isla que era considerada territorio rebelde desde donde se reincorporaron los nacionalistas del Kuomintang y perdieron la guerra civil contra el ejército comunista en 1949. JS